Me siento a esperar como un perro fiel a su amo, suspiro por cosas que perdí y que no podre recuperar jamas, es sin duda alguna esa espera que parece eterna, pero en el fondo se que no es así. Intente preocuparme mas de la cuenta por alguien, tal vez por algo que al final no tenia ningún sentido, y me preguntaba a mi mismo si valía la pena seguir gastando mas energía y me respondí que ya no era necesario.
Mientras esperaba, miraba mi futuro entre las nubes de humo de un cigarro consumiendose rápidamente por la brisa nocturna, en el veía todo el tiempo transcurrir como una carrera sin frenos ni paracaídas, era lógico creer que podría estar alucinando, pero no era así, mi verdad la estaba viendo delante de mi y debía aceptarla por muy dolorosa que fuera. Nada tiene sentido, no había ni una sola oportunidad para poder enmendar las cosas, solo trate de enviar mis pensamientos hermosos a esos seres con los cuales me equivoque en un pasado que parece inarreglable.
Que mas me quedaba?, me pregunte entre el espeso humo blanco y maloliente, nada, nada tenia que pensar, solo me tocaba esperar, esperar que mis errores fueran olvidados y borraran parte de las cicatrizes dejadas que aunque fueron heridas profundas nunca perdí la fe de que quedaran anclados en el pasado, pero me tocara llevarlos encima, tal vez en mi mochila de recuerdos rotos y desgastados.
Ya no quiero pensar mas, solo quiero que empieze ese ciclo a ver que demonios me traerá.
PENSAR PARA QUE? (ORIGINAL)
GERARDO CAPIELO
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